En la tarde del 19 de Agosto, un inquietante descubrimiento conmocionó a los transeúntes de la Avda. del Voluntariado en Crevillent. Un matrimonio que pasaba por la zona se encontró con una escena perturbadora debajo de un majestuoso algarrobo centenario de dimensiones imponentes. Lo que parecía ser una figura en una postura inusual resultó ser un hombre que se había ahorcado, dejando a todos impactados y consternados.
Alrededor de las 8 de la tarde, mientras transitaban por la Avda. del Voluntariado, un matrimonio fue testigo de una escena que perturbó su tranquilidad. Bajo la sombra del algarrobo centenario, avistaron a un hombre en una posición que sugería algo fuera de lo común. Sin dudarlo, decidieron investigar más de cerca.
Al acercarse, se encontraron con la impactante y desgarradora imagen de un varón de aproximadamente 60 años. Este individuo, de apariencia normal y complexión delgada, yacía ahorcado. Su rostro mostraba los signos inconfundibles de la cianosis, un indicativo claro de estrangulamiento.
El matrimonio, visiblemente conmocionado por el escalofriante hallazgo, contactó de inmediato al servicio de emergencias 112. En un tiempo asombrosamente rápido, en tan solo 5 minutos, dos patrullas de la policía municipal llegaron al lugar de los hechos. Su objetivo era claro: intervenir y tomar medidas ante esta triste y alarmante situación.
Las patrullas de la policía municipal procedieron a cortar la soga que sostenía al hombre, en un esfuerzo por rescatarlo y brindarle los primeros auxilios. Desafortunadamente, a pesar de sus valientes esfuerzos, los intentos de reanimación resultaron en vano. La vida del hombre ya se había extinguido.
La escena atrajo también la llegada de una ambulancia del servicio de urgencias. El personal médico, equipado para enfrentar situaciones de emergencia, evaluó rápidamente la situación. Sin embargo, se vieron obligados a constatar una verdad dolorosa: la vida del individuo ya se había apagado, dejando atrás un misterio en torno a los motivos detrás de su trágica decisión.
Este triste acontecimiento en la Avda. del Voluntariado en Crevillente ha dejado a la comunidad impactada y reflexiva. La escena de un hombre que elige poner fin a su propia vida bajo un algarrobo centenario sirve como un recordatorio sombrío de la complejidad de la condición humana y la importancia de la comprensión y el apoyo a quienes puedan estar luchando en silencio.
Fuente: diarioalicante.es